Es la forma artesanal en que alimentamos a nuestro ganado, es una dieta totalmente basada pasto o forraje y en un ambiente donde los animales se alimentan libremente caminando y asoleándose en la pradera, libres de estrés y sin cargas hormonales, preservativos, estrógenos, clembuterol o químicos sintéticos.

Porque en nuestro rancho, desde que se engorda el ganado, nos autoregulamos y nos propusimos la meta de no aplicarle ninguna hormona, en específico la hormona del crecimiento, que todas las engordas de ganado tipo intensivo utilizan y que el gobierno no prohíbe

Me refiero a que nuestros animales que están 100% libres de clembuterol, hormonas, anabólicos,
estrógenos, preservativos o químicos sintéticos, que son frecuentemente utilizados en las engordas intensivas tradicionales. Y a que nuestras carnes se procesan sin utilizar inyección de ablandadores químicos de carne, que también son comúnmente utilizados para maximizar el peso de la carne.

Los beneficios a la salud física y mental por comer este tipo de carne son varios, por mencionar los mas importantes, tenemos que: contiene más antioxidantes que impiden el deterioro de las células, contiene el balance perfecto de ácidos grasos Omega-3 que ayuda al desarrollo mental y mejora del aprendizaje y Omega-6 que juntos ayudan a prevenir y combatir enfermedades como obesidad, diabetes y cáncer, contiene más ácido linoleico conjugado (CLA) que ayuda a la quema de grasas saturadas y reducción del colesterol LDL, además, contiene más Vitamina E que ayuda a prevenir enfermedades cardíacas. También es una fuente de Vitamina B12 que ayuda a darle mantenimiento al sistema nervioso central.

Definitivamente la diferencia es muy radical, resumiendo podemos decir que la carne de ganado criado en libre pastoreo es mucho más saludable que la carne de ganado criado en sistema intensivo, y la causa de origen es que el ganado engordado en libre pastoreo crece en un ambiente natural, sin estrés, deambulando y asoleándose al aire libre en las praderas, alimentándose de pastos directamente del suelo (que es su forma natural y evolutiva de alimentarse) y no consume químicos añadidos ni le son aplicadas hormonas.

Si, el sabor de la carne es más intenso, más sabroso, debido a la gran cantidad de nutrientes que contiene la carne de este tipo.

No puede considerarse el consumo de este tipo de carne como un remedio o tratamiento para alguna enfermedad en específico ya existente en alguna persona. Sin embargo, por su alto valor nutricional, es altamente recomendable, desde el punto de vista de la prevención de la salud humana.

Solo en el caso de que hayas probado alguna vez la carne de res de campo podrías tener como referencia ese sabor más intenso a carne, pero sin la extrema firmeza de su textura, ya que nuestro rancho cría ganado de genéticas mayormente europeas, es decir, razas que por su genética, están condicionadas a producir carne, y que por tal motivo, son más propensos a suavidad, terneza y marmoleo de forma natural. Es importante tomar en cuenta que nuestras carnes pasan por un proceso previo de “maduración” , lo que les da un sabor y terneza únicos o difícilmente comparables.

Definitivamente sí. Aún y cuando la forma de preparación tiene mucho que ver, definitivamente deberás experimentar una notable diferencia en el sabor y textura de nuestra carne, debido a sus 3 cualidades especiales: provenir de ganado alimentado a base de pasto, por ser de genética de preponderancia europea y por pasar por un proceso de maduración.

No. Aunque hay recetas o técnicas que favorecen el consumo mas saludable de la carne, no hay formas “especiales” para evitar que se pierdan sus propiedades, o dicho de manera contraria: casi en cualquier forma que se le cocine la carne conservará sus propiedades.

No se tienen datos de algún país que por su legislación, costumbres o religiones consuma exclusivamente este tipo de carne. Sin embargo, en Europa existen países con fuertes corrientes políticas que intentan detener el crecimiento comercial de la ganadería intensiva, e incluso eliminarlo o prohibirlo, como es el caso de Países Bajos y Suiza, respectivamente.

El pastoreo para la alimentación o crianza de diferentes especies de ganado es una práctica milenaria. Siempre ha sido así desde el principio de los tiempos y de los asentamientos humanos mas remotos en la historia. Con la modernización, el crecimiento exponencial de la población humana y su concentración en grandes urbes, fue necesario migrar a la práctica de la crianza o engorda intensiva, para solventar la gran demanda de carne para consumo humano.

Si. La gran mayoría de especies de ganados criados para obtención de carnes para consumo humano son susceptibles de alimentar en libre pastoreo. Por obvias razones, la raza bovina o vacuna es la que más ha proliferado en volver al libre pastoreo en los últimos años.

Aún y cuando es relativamente más cara, no existe una regla o un porcentaje definido a considerar, ya que ello dependerá de muchos factores, entre los más importantes tenemos: la raza de ganado, el mayor tiempo que se lleva alcanzar la talla promedio de los animales para llevarlos a sacrificio, el costo de los insumos para siembra de forrajes y el clima es factor fundamental (por el agua de lluvia que se requiere). Sin embargo, es de tomarse en cuenta que, aunque el precio por kilo de carne es mas alto, también lo es el rendimiento al cocinar la carne, pues cada kilo es 100% pura carne, a diferencia de las carnes de engorda tradicional que se les inyecta líquido ablandador, donde cada kilo podría ser 80% carne y 20% agua, ya que ese líquido representa un porcentaje del peso (entre 14 a 20%).

Si. Porque somos nuestros propios proveedores de carne, sin intermediarios y con abasto suficiente.

Dado que contamos con nuestro propio rancho ganadero, somos nuestros propios criadores y engordadores de ganado. Nuestra ganadería local cuenta con más de 30 años de presencia en la región de Angostura, Sin. y es ampliamente reconocida por alimentar ganado a base de libre pastoreo, contamos además con certificación de SENASICA de Buenas Prácticas Pecuarias, implementada por parte del Comité Estatal de Fomento y Protección Pecuaria de Sinaloa, así como registro ante la Unión Ganadera Regional de Sinaloa. Lo que da certidumbre sobre la seriedad con la que nos tomamos nuestra labor diaria como engordadores a base del sistema de libre pastoreo.